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Taxdirt se encuentra situado a unos 15 kilómetros al oeste de Melilla, y fue el lugar donde la tarde del 20 de septiembre de 1909, el 4º Escuadrón del Regimiento de Cazadores Alfonso XII, de Caballería, al mando del teniente coronel Don José Cavalcanti de Alburquerque y Padierna, ejecutó brillantemente tres cargas contra una masa de 1.500 rifeños armados que acosaban una posición defendida por tropas de Infantería, Artillería e Ingenieros, logrando hacerles huir.
A finales de julio de 1909, España vivía unos difíciles momentos, consecuencia de la situación en Marruecos, en la que los sucesos del Barranco del Lobo y de la Semana Trágica no eran en absoluto ajenos y, para mayor complicación, el prestigio de nuestro ejército no vivía sus mejores tiempos.
Esto obligó a reaccionar al Gobierno, que decidió enviar a Melilla la 2ª Brigada de Cazadores (del Campo de Gibraltar), a la que se agregó un Escuadrón expedicionario del Regimiento de Caballería Alfonso XII, constituido sobre la base del 4º Escuadrón, al mando del capitán Don José Álvarez Moreno, y completado con personal voluntario de los tres restantes. Por entonces el Regimiento se encontraba de guarnición en Jerez de la Frontera.
El Escuadrón llegó a Melilla el día 30 de julio, dedicándose a realizar los preparativos de las acciones que empezaron el día 20 de septiembre. El Comandante de la zona, general Marina, decidió pacificar el norte de Melilla, y con esa finalidad dividió sus fuerzas en dos columnas: una se dirigió al sur y la otra más al norte, con dirección a Tardar, donde los rifeños habían acumulado fuerzas para su defensa.
Esta segunda columna, conformada alrededor de la División de Cazadores y al mando del general Tovar, emprendió la marcha a primeras horas de la mañana, en la que el Escuadrón del Regimiento Alfonso XII, menos una sección, constituía la extrema vanguardia, siguiendo las fuerzas de Cazadores de Cataluña, Compañía de Zapadores Minadores, una batería de montaña y una sección de ametralladoras. El grueso lo formaban los cuarteles generales de la división y la segunda brigada, Cazadores de Tarifa, una batería de montaña, Cazadores de Talavera y sección segregada del Escuadrón de Cazadores de Alfonso XII.
Como consecuencia de los avatares de la contienda, en la que 1.500 rifeños acosaban nuestras tropas, llegó el momento en que el general Tovar decidió que su ayudante, el teniente coronel Cavalcanti, dirigiera el Escuadrón, con tan solo 65 caballos, para poner a la fuga tal masa de enemigos.
Y lo consiguió. Se necesitaron tres cargas, la ultima con 20 caballos, pero logró el objetivo, sufriendo el Escuadrón numerosísimas bajas. Al teniente coronel Cavalcanti se le concedió, por los meritos en Taxdirt, la Cruz Laureada de San Fernando.
El 27 de junio de 1910, el Escuadrón volvió a Jerez en olor de multitud, según cuentan las crónicas de la época, siéndole otorgada la Corbata de la Cruz de San Fernando, que le fue impuesta por el rey Alfonso XIII en Sevilla, a las once de la mañana del miércoles 23 de noviembre de ese mismo año, con la asistencia de los Estandartes de todos los Regimientos de Caballería existentes en aquel momento. En 1917 el regimiento se traslada a Sevilla hasta su fusión con el Regimiento Sagunto.
Hoy día, 113 años después de la hazaña de Taxdirt, se sigue celebrando anualmente un solemne acto en el patio del Cuartel General de la Fuerza Terrestre (Capitanía, en Sevilla) desde la disolución del Regimiento de Caballería Sagunto 7 en 1995. Hasta entonces, dicho acto se celebraba en el cuartel del Regimiento de Caballería Sagunto 7, como heredero que fue del Regimiento de Cazadores de Alfonso XII, (https://ejercito.defensa.gob.es/unidades/Sevilla/futer/Noticias/2018/044.html). En ese solemne acto se rinden honores a los Cazadores de Taxdirt, y donde se canta su bello y vibrante himno (https://youtu.be/tOpvzLkOiN8), en el que una de sus estrofas dice:
«…Suena el clarín… con sus bélicos sones de guerra.
Suena el clarín… óyelo, Cazador de Taxdirt.
Vamos allá… galopad sin cesar.
Si lucháis como buenos… no tenéis que temer…
A la Carga, a la Carga, a la Carga, bravo Cazador…«
Tomas Torres Peral
